Hemos recibido comunicados por parte de las principales navieras que nos alertan sobre la posibilidad de un incremento inminente en los costos asociados a los fletes. Así como las terminales, que tienen que renovar su flota en los próximos dos años para logar su meta de descarbonización.
A modo ilustrativo, en la parte inferior de este mensaje encontrarán un ejemplo que clarifica el impacto potencial en los costos.
“A partir del 1 enero de 2024, toda la actividad marítima dentro del espacio Económico Europeo entrará en el Régimen de Comercio de Emisiones de la Unión Europea (EU ETS).
Esta reforma representa un cambio importante y un paso adelante en la lucha contra el cambio climático.
El EU ETS es un mecanismo de fijación de precios del carbono establecido por la Unión Europea en 2005 para luchar contra el cambio climático.
Su objetivo es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero obligando a todas las empresas a adquirir derechos de emisión, también conocidos como «permisos de emisión», por cada tonelada de dióxido de carbono (CO2) que produzcan.
El objetivo es promover la reducción de emisiones fomentando la eficiencia energética y la inversión en tecnologías más limpias.
El sector marítimo se integrará en el EU ETS a partir de enero 01 de 2024, lo que significa que todos los barcos que hagan escala en puertos europeos estarán sujetos al régimen.
Las compañías navieras tendrán que declarar sus emisiones de CO2 y comprar el equivalente en derechos de emisión en el mercado EU ETS.
Estos derechos se reducirán progresivamente a lo largo de los años, lo que obligará a la industria naviera a reducir sus emisiones de carbono: el 40% de las emisiones de CO2 deberán convertirse en derechos en 2024, luego el 70% en 2025 y finalmente el 100% de las emisiones en 2026.
Como empresa naviera, estaremos obligados a comprar derechos de emisión, lo que generará costos adicionales relacionados con el precio del carbono.
Los costos asociados con la compra de estos derechos, así como las inversiones necesarias para reducir nuestras emisiones, aumentarán nuestros costos operativos.
En consecuencia, la implementación del EU ETS tendrá un impacto en nuestros precios, con la aplicación el 1 de enero de 2024 de un recargo EU ETS, cuyo importe se comunicará a principios de diciembre.”